My City...

Extraño ese cielo cuarteado, tu olor a mantequilla y tus calles atestadas. El mind the gap, los empujones en el metro y los perdones y gracias corteses. La puntualidad, Portobello Rd y sus cachivaches. Perderme en tus calles que me regalan flores, comer fish&chips y visitar tus museos. Candem town market, tu canal, tus punkies, tus turcos sucios y All one pound!!! Los puestos de flores y juguetes de madera, el pilotito de las casas del parlamento encendido cuando hay pleno, el cambio de guardia en Buckingham Palace. Paseos por Hyde Park, los cerezos en flor de Regent's Park y la casa entre flores de St.James'Park. Pasar por delante de la casa de Baden Powell y saludar a su estatua, mirar a la izquierda antes de cruzar y comer muffins. Ir de noche a Picadilly Circus y sentarme bajo la estatua de Eros a ver cómo se reflejan las luces, el Covent Garden y su alboroto y oir a niños hablando en inglés. Descansar en las escaleras frente a London Tower y observar cómo ha pasado el tiempo y cómo no lo ha hecho, cruzar Tower Bridge con la cabeza hacia arriba para admirar su hermosura. Recorrer Carnaby St. y entrar en todas las tiendas, tomar café en el Soho y una cerveza en Oxford St. Cruzar miradas con personas que transmiten sensaciones frescas, de recién llegados, de esperanza, de incertidumbre, de miedo a lo desconocido pero sobre todo, de expectación y mirarte en un espejo y reconocer esa mirada en tí...Podrán criticarte, maltratarte y maldecirte, pero eres hermosa y lo sabes

Esto es para mi London, porque es y siempre sera my city,tengo miedo de volver porque cada vez me cuesta más regresar...

Niebla en mi cabeza

He tardado mucho en volver a subirme a mi tejado, he estado demasiado ocupada aquí abajo, en la tierra firme. Extrañaba mi tejado, el ver las cosas y a las personas desde aquí arriba y poder ser algo más crítica conmigo y con lo que me rodea. Las circunstancias de la vida mundana me obligaron a bajar y ahora me ha costado trabajo auparme de nuevo, pero como una buena felina, he sacado fuerzas de no-se-donde y encogiendo mi cuerpo he cogido impulso para dar de nuevo el salto...

Pero cuando he llegado al tejado me he dado cuenta de que una enorme neblina lo inunda todo, desde que he vuelto a subir hay algo que tengo dentro, dando vueltas, revoloteando dentro de mi, como una extraña sensación que hace años que no tenía...parece, como si al respirar introdujera parte de esa neblina en mí y, es raro, pero me está ganando o no sé, quizá me esté dejando ganar... No digo que el dejarme intoxicar por esa niebla sea algo malo, digo que es raro, volver a tener esos sentimientos, esa neblina que hace que mi cara se sonroje...pero en esta ocasión es distinto y más intenso...será la edad

se escapa

como la arena escurriendose entre los dedos, así siento que se me escapa la energía... desde hace unos días no sé qué me ocurre, no entiendo mi mundo. Doy gracias a todo porque el miedo se disipó al ver cómo se abrían tus ojos después de que unos cirujanos abrieran tu cuerpo, porque te estes recuperando tan pronto y tengas tantas ganas de hacer cosas... Pero aún así, con toda la felicidad y amor del mundo, no sé bien qué me ocurre, estoy apática, como con un vacío, nada me sale a derechas, rompo cosas, discuto con todo el mundo y sólo tengo ganas de meterme en la cama y taparme con una manta bien gorda...